Aunque aún faltan varios meses para la definición de candidaturas a las presidencias municipales que se votarán en 2021, es un hecho que la soterrada guerra de los aspirantes de todos los partidos ya comenzó en Quintana Roo.

Esta lucha es especialmente cierta en el partido Morena, donde más de uno busca la misma silla y están dispuestos a todo para conseguirla, y particularmente cruenta en Cancún, donde Mara Lezama pretenderá reelegirse, pero donde muchos son los que tratarán de impedirlo, dentro y fuera de las huestes de la llamada 4T.

Mara Lezama, una alcaldesa que no pudo resolver el problema de la violencia en el principal destino turístico de México y que se ha visto tiznada por su frivolidad y las acusaciones de corrupción por las sospechas sobre el inocultable incremento del patrimonio de su familia, se encuentra en estos momentos en sus días más bajos, aunque no derrotada.

La existencia de una denuncia presentada ante la SEIDO y la UIF no es poca cosa ni es ‘fake news’ y, tras la arenga presidencial de la semana pasada de que se investigue a quien sea, las autoridades tendrán que pronunciarse al respecto, aunque funcionarios como Santiago Nieto hayan intentado jugarle a la ’tapadera’.

La denuncia es sobre los negocios inmobiliarios de la familia de Mara Lezama iniciados desde 2016, cuando declinó participar como candidata a la gubernatura en medio de rumores no probados de que recibió mucho dinero y placas de taxi de Borge para hacerse a un lado.

La denuncia por sí sola no es una prueba, pero la autoridad tiene la obligación de investigar los hechos que ahí se documentan para decidir si hay elementos o no de irregularidades en el patrimonio de la alcaldesa de Benito Juárez. Aunque ya se vio que Mara tiene poderosos aliados dispuestos a ayudarla en los momentos difíciles.

Pero los problemas apenas empiezan para la ex comunicadora porque adversarios le están saliendo por todos lados, dentro y fuera de Morena.

La senadora Maribel Villegas, morenista y también con algunos aliados poderosos dentro y fuera de la 4T, inició desde hace semanas un fuerte activismo en colonias y regiones de Cancún y ha dicho a todo el que la quiera escuchar que buscará la presidencia municipal de Benito Juárez, en lo que se entiende sería un escalón en sus aspiraciones de ir en 2022 por la gubernatura de Quintana Roo.

Algunas encuestas posicionan mejor a Marybel que a Mara Lezama, pero nuevamente la decisión de quién será la candidata se tomará a nivel central.

Sin embargo, al escenario político de aspirantes también han saltado diputadas como Reyna Durán, de las fundadoras de Morena, que han lanzado una metralla de ‘fuego amigo’ contra Mara Lezama al presentar un exhorto en el Congreso de Quintana Roo para que se le investigue por sus negocios inmobiliarios.

Y por fuera están personajes como el joaquinista Jesús Pool Moo, diputado federal ex morenista y ahora perredista, que también estaría dispuesto a buscar la presidencia del municipio con el mayor presupuesto de Quintana Roo.

Pero la lista es larga. Otros más se sumarán en las próximas semanas porque Cancún es la cereza del pastel al cual le quieren hincar el diente y la batalla apenas empieza.

Mara, a quien se le sabe nerviosa por los acontecimientos recientes, precisa de reelegirse para tener alguna oportunidad real de disputar la candidatura a la gubernatura y para ello ha hecho alianzas, aunque la realidad es que su única carta es la de esperar a ser favorecida por el dedo presidencial, al igual que todos los demás aspirantes.

En Morena no hay de otra.

Lo malo es que, como siempre ocurre, los cancunenses son los convidados de piedra en este enfrentamiento que se avecina, rehenes permanentes de los intereses políticos del momento que mantienen al destino en un atraso social y de seguridad que ensombrecen su futuro.

FUENTE: Noticaribe

Discover more from Omelette Político

Subscribe now to keep reading and get access to the full archive.

Continue reading