Fundador de Morena, ferviente promotor de la “4T” y aspirante a la Presidencia Municipal de Tulum, David “Fili” Tah Balam ha dado un golpe de timón que representaría el último clavo sobre el féretro político del aún alcalde Víctor Mas Tah.
Inconforme -otro más- con el resultado del proceso interno de Morena, donde la bendición cayó sobre Marciano Dzul, el joven activista presentó una queja ante la Comisión de Honor y Justicia del partido argumentando que no se tomó en cuenta a los militantes que, como él, “picaron piedra” y “sudaron la camiseta” desde el principio.
Pero he aquí que así como se dio la magia con Jorge Portilla, que entre sorbo y sorbo de café pactó ayer con Marciano un acuerdo para ayudarlo en su campaña, de igual manera “Fili” Tah sucumbió a los encantos del candidato y al parecer ha decidido sumarse al equipo morenista que busca echar del Palacio Municipal a Víctor Mas, que llegó como promesa a gobernar pero que está cerrando su trienio hundido hasta el cuello en graves problemas de inseguridad, acusaciones de corrupción y una supina incapacidad para haber cumplido todo lo que prometió a los que creyeron en él y que hoy lo califican como un auténtico fraude político.
Si en Morena ya Jorge Portilla y David “Fili” Tah cerraron filas con Marciano Dzul, ya es poco, muy poco, lo que el hombre del bigotito rebelde que calienta la silla en el Palacio Municipal, puede hacer para lograr sus aspiraciones de repetir otros tres años como alcalde de Tulum.
